Artículo de Ernesto Vera, 8 de agosto de 2014.-
La muerte es algo que impresiona a casi todos: es un tema sensible que causa lástima, dolor y espanto.
Pero la muerte esta en todos lados. No sólo en la Franja de Gaza, sino en las prisiones cubanas, cuando un reo se quita la vida para no continuar viendo los horrores de sus carceleros.
La muerte está presente en cada día de nuestras vidas porque siempre estamos perdiendo algo: perdemos al amor, perdemos la esperanza, perdemos los deseos de luchar por una Cuba Nueva. Perdemos el valor tantas veces….
Y entonces usted ve canales como TeleSur, que no paran de hablar de las muertes ocasionadas por el ejército israelí en Palestina, que ya suman 1800 los fallecidos. Sin embargo ese mismo canal olvida que en su propio país hubieron 41 víctimas a causa de de la represión, y que suman ya 25 mil los venezolanos que mueren cada año debido a la violencia que encuentra un cómplice ideal en el régimen de Nicolás Maduro
Muy pocos dicen la verdad, muy pocos miran hacia el conflicto con objetividad. Casi nadie dice que Hamas es una organización terrorista de origen palestino que siembra el pánico en la población israelí. Israel tiene derecho a defenderse.
A las cosas hay que llamarles por su nombre. Es normal que tanta sangre y gritos nos conmuevan pero hacia dónde van las cosas? Quiénes son las verdaderas víctimas del conflicto?
Y esos mismos medios que hoy exigen a Israel, por qué no lo hicieron con el régimen de Fidel Castro cuando asesinó a 41 personas En la madrugada del 13 de julio de 1994.
Qué hizo la ONU en aquellos momentos? Acaso de allí salió una Resolución de Condena contra el régimen castrista por el asesinato de 41 personas inocentes y que la mayoría de ellos eran mujeres y niños? Nada, mucho silencio.
El mismo silencio cómplice que hoy cubre a Venezuela. Ese mismo silencio que nos hace padecer tiranías por siglos.
Créanme que no miraré a Gaza, tampoco a Ucrania, como no sea para condenar la intromisión de Rusia, una potencia que pretende desmembrar a una nación.
No hablaré de las víctimas de un lado ni del otro.
Sólo recordaré a todos que la muerte puede estar en cualquier lado. Y que muchos opositores en Cuba pueden ser asesinados en cualquier momento, pues aquí no tenemos un Estado de Derecho y campea la impunidad.
Prefiero estar pendiente de aquellos que hoy están siendo amenazados de muerte por el régimen de Raúl Castro, son muchos, la lista es larga, y la componen todos aquellos que hoy luchan por los Derechos Humanos, aquellos que no guardan silencio ante tanta desigualdad e hipocresía.
También estaré observando lo que suceda en las prisiones cubanas, allí también hay muertes y no son reflejadas en los grandes diarios.
Desde mi humilde puesto trataré de ayudar a todo el que pueda, trataré de ser la luz que guíe a aquellos que han perdido la fe en el cambio.
Quiero hacerles comprender a Todos que el Cambio está en nosotros mismos, en nuestro valor, en nuestra fuerza. Depende de nosotros. Es el Momento!