
Por Alvaro VILLALOBOS (AFP)
París — El disidente Elizardo Sánchez cuestionó este miércoles en París el compromiso del Gobierno cubano con los derechos humanos en sus negociaciones con la UE y denunció las inversiones extranjeras que solo buscan una mano de obra barata en la isla.
El Gobierno de Raúl Castro aceptó a principios de mes la propuesta de la Unión Europea (UE) de entablar negociaciones para normalizar la relación bilateral, estancada desde hace una década.

En una entrevista con la AFP en París, Elizardo Sánchez, presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, afirmó que los gobiernos europeos, que se proponen alentar las reformas en curso en la isla comunista, “están actuando de buena fe”.
Pero “pensamos que el gobierno de Cuba no tiene la más mínima voluntad para introducir reformas que son urgentes”, objetó.
Por eso “no puedo ocultar nuestro escepticismo en cuanto al desenlace de estas conversaciones bilaterales”, agregó.
El veterano líder de la oposición interna cubana, de 69 años, que pasó ocho años y medio en la cárcel, fue recibido el lunes por dos funcionarios de la cancillería francesa. Tres días antes, el ministro de Exteriores francés, Laurent Fabius, quien anunció este miércoles que “pronto” visitará la isla, había recibido a su homólogo cubano Bruno Rodríguez.
El encuentro de Sánchez con los funcionarios franceses, “muy bien informados de la situación en Cuba”, fue “muy cordial, sustantivo”. “Estuvimos examinando elementos puntuales en las principales demandas que hacemos”, indicó.
La Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, ilegal en la isla, pide “la liberación incondicional de todos los presos por motivos políticos” (82, según Elizardo Sánchez), “el fin de la represión política” , “el respeto de los compromisos internacionales ya suscritos por el gobierno de Cuba” y “el reconocimiento de la legitimidad de la sociedad civil cubana independiente”.
“La pretensión nuestra es que en estas conversaciones la UE mantenga en un lugar alto de la agenda el tema de los derechos humanos”, insistió Sánchez.
– “Repartirse el pastel cubano” –
Elizardo Sánchez criticó el aprovechamiento de una mano de obra “barata, obediente e indefensa”, en un contexto de apertura de la economía cubana a capitales extranjeros y se refirió a los de países latinoamericanos como México y Brasil.
“Detrás de los gobiernos de México y Brasil están los intereses de compañías brasileñas y mexicanas que quieren participar en el pastel cubano, lo cual es bien triste, porque ese pastel está disponible para inversores deseosos de ganancias sobre la base de una mano de obra barata”, explicó.
Del lado de las reformas anunciadas en los últimos años por el gobierno de Raúl Castro, Sánchez afirmó categórico que “en Cuba no ha tenido lugar ninguna reforma, sólo cambios limitados, tardíos y de muy poco calado, encaminados básicamente a enviar falsas señales de cambio hacia el exterior”.
Eso sí, reconoció que “el levantamiento de las restricciones de viaje es obvio”, puntualizando que aún “no ha habido una reforma migratoria”.
“Todavía un número indeterminado de cubanos no puede salir de la isla por razones políticas y también decenas de miles de cubanos que viven en el extranjero no pueden regresar a Cuba ni siquiera de visita, porque el gobierno lo prohíbe, alegando que eran antiguos opositores o personas desafectas al régimen”.
Sánchez denunció que, como el Gobierno “se ha dado cuenta de que tener presos políticos da muy mala fama”, ha optado por la llamada “represión política de baja intensidad”, consistente en detenciones por horas y días, sin que luego haya una condena de cárcel.
“En los últimos tres meses -diciembre, enero y febrero- verificamos al menos más de mil detenciones y otros actos represivos en Cuba”, afirmó.
Tras su paso por Francia, Sánchez dijo que viajará a Bruselas para reunirse “a niveles modestos con funcionarios de nivel intermedio, eurodiputados y otras organizaciones”.
Fuente: AFP